miércoles, 24 de febrero de 2016

Raúl Gorrín: ¿Tiene el salario un impacto en la productividad?

Por Raúl Gorrín. Mientras que muchos trabajadores afirman que la satisfacción laboral y el sentido de propósito impulsa la productividad, los expertos señalan que salario también juega un papel distintivo en la calidad del trabajo que los empleados realizan. El pago de incentivos, basado en la cantidad de los trabajos efectuados en lugar del tiempo empleado en el trabajo, es particularmente beneficioso para aumentar la productividad de los trabajadores. Al mismo tiempo, de acuerdo con un estudio de la Escuela de Negocios de la Universidad de California, el salario no es el único factor que afecta a la productividad de los trabajadores.

Un estudio sobre El impacto del salario en los niveles de productividad en los Estados Unidos señala que el salario generalmente connota a un salario fijo -basado en un conjunto de tareas que deban realizarse al mes o a la semana- no estimula necesariamente al trabajador,  si bien proporciona una garantía de seguridad a los empleados. El informe dice que el hecho que los empleados saben que van a recibir un salario por sus horas de trabajo puede conducir a la eliminación de retos ya que los trabajadores saben que les van a pagar sin importar cuánto producen. Más adelante dice que los aumentos basados ​​puramente en el tiempo pasado con la empresa puede ser un desincentivo para los empleados,  mientras que los aumentos salariales en función del rendimiento fomentan una mayor productividad.
 
Asimismo, el informe dice que los incentivos pueden trabajar de diversas maneras. Primero sugiere que se pueden eliminar por completo los salarios por hora y pagar a sus trabajadores simplemente por el trabajo a destajo. El pago por pieza -señalan- es particularmente eficaz cuando el talento de la fuerza de trabajo varían drásticamente. Los trabajadores capaces de una producción más rápida son recompensados ​​de manera adecuada y los trabajadores nuevos en el negocio pueden aumentar su salario con la práctica y la experiencia. 

Más adelante asegura que el trabajo a destajo es común entre una fuerza de trabajo en el hogar, tales como escritores y costureras independientes. A los escritores a veces se les paga por artículo y  las costureras -por ejemplo- son compensadas ​​por el número de piezas que hacen. Cada empleado tiene la opción de aumentar la producción para ganar más. La productividad laboral es entonces auto-determinada y si se recibe un pago por trabajo realizado argumenta la motivación e intención de generar mayores beneficios y por ende ser más productivo.

Para motivar a los trabajadores de manera efectiva para aumentar la productividad, es necesario emplear un conjunto de herramientas que incorporen los aumentos de sueldo mientras se coloca mayor énfasis en las recompensas no monetarias. Por ejemplo, permitir que un trabajador se ausente de sus labores para atender a su hijo enfermo puede ir mucho más lejos en la creación de lealtad de un empleado y  el incremento de la productividad que un aumento de sueldo. 


Proporcionar formación y oportunidades de progreso motiva a los trabajadores para aumentar la productividad al tiempo que aumenta su sentido de valor a la empresa. La comunicación abierta, la justicia, la seguridad, y las recompensas destinadas a un trabajo satisfactorio también complementan un estilo de gestión equilibrada que estimula tanto la lealtad y una mayor productividad.

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